viernes, 13 de noviembre de 2009

Mi Cumpleaños

Esta historia ocurrió hace ya un tiempo y fue precisamente el día de mi cumpleaños. Ese día habíamos quedado, mi marido y yo en ir a cenar con el padrino de mi hijo menor. Quedamos con él en nuestra casa y vino a la hora indicada. Mientras yo terminaba de arreglarme y tal como había quedado con mi pareja, él aprovecho para enseñarle la revista Clima, una revista erótica y de contactos donde suelo enviar mis fotos. Nuestro amigo se la estuvo mirando y leyendo hasta casi el momento justo que yo salí de la habitación casi arreglada. Me iba a ir a terminar de arreglar cuando él me pregunto que sentía cuando veía mis fotos en esa revista, y yo le contesté que me excitaba un montón verme y pensar que seguramente más de una persona se excitaba también al verme.

Entonces mi compañero dijo:- Tú no sabes lo que a Mar le gusta, es una exhibicionista
Nuestro amigo, un poco desconcertado y dirigiéndose a mí me pregunto:
- ¿Es eso verdad? Y yo le dije que si, que me gustaba mostrar mi cuerpo, excitar pensando que seguramente alguna persona al verme no tendría más remedio que hacerse una paja a mi salud. Me terminé de arreglar y nos dispusimos a salir a cenar. Yo me había vestido con una minifalda negra, unas botas del mismo color y una camiseta con botones en la parte delantera sin llevar sujetador. Fuimos a cenar fuera de Barcelona, a una población marítima, y en medio de la cena y supongo que aún incrédulo, me pregunto si era verdad que disfrutaba provocando con mi cuerpo. Casi si se lo tuve que prometer diciéndole que esto era una de mis fantasías sexuales favoritas y que podía llevar a la practica. Nuestro amigo cada vez estaba más sorprendido, mientras que mi marido se divertía cada vez mas por la situación. Entonces este último le dijo:
- Uffff, si supieras... Mar siempre me ha hablado de su sueño de estar con una persona bastante más mayor que ella, de estar con uno mucho más joven, de hacer un intercambio de parejas e incluso de tener una relación bisex y se que algunas de estas cosas las llevará tarde o temprano a la práctica.
Creo que aquí nuestro amigo ya pensó que todo era una broma y continuamos hasta el final de la cena hablando de otras cosas. Cuando decidimos irnos del restaurante mi compañero me dijo:
- ¿Que Mar, vamos a demostrarle de lo que eres capaz?... ¿porque no vamos a una de esas terrazas cerca de la playa.

Dicho y hecho, nos fuimos a una en la que ya había varias mesas ocupadas aunque también muchísimas libres. Escogimos una mesa en la que me fuera fácil intentar excitar a los ocupantes de otras mesas. Al poco de estar ahí, la mesa que teníamos delante fue ocupada por tres chicos jóvenes, les dejamos que se aposentaran y yo me fui un momento al servicio. Al regresar me había desabrochado tres botones de la camiseta, con lo cual una parte importante de mi pecho quedaba a la vista de esos tres chicos. Cuando empecé a ver que miraban ya bastante seguido hacia mi le dije a mi compañero:
- Ahora lleva tus manos a una de mis piernas
Cosa que hizo pues no era la primera vez que hacíamos eso y me la empezó a acariciar, subiendo cada vez más su mano con lo que mi corta falda cada vez me cubría menos. Yo también con mis movimientos iba ayudando a que cada vez se pudiera ver más, incluso mis braguitas. En un momento aproximé mis labios a los de mi marido, empezamos a besarnos llevando él su mano hacia mis pechos y con total descaro la introdujo dentro de la camiseta, empezando a acariciarme una de las tetas. Estuvo un rato así y ya saco la mano intencionadamente para que esa teta me quedara fuera. Las caras de los tres chicos eran de alucine puro y dos de ellos se levantaron para ir al lavabo. Entonces le pedí a nuestro amigo que fuera también él hacia ahí para ver si podía enterarse de algo. Cuando se levantó me fije en su entrepierna y le noté un buen bulto.

Regreso al cabo de un tiempo y ante nuestras preguntas nos dijo:
- Pues si, se han ido a chascársela, incluso he oído que uno de ellos le decía al otro "la zorra esa me ha puesto como una locomotora" y a lo que el otro le había respondido "Mira si será puta que me la estoy meneando a su salud, si no fuera porque va acompañada me la follo aquí mismo",
Cuando nuestro amigo nos lo contó, yo noté que mi excitación iba en aumento, notaba ya mi coño completamente mojado. Al llegar a casa le dijimos que subiera a tomarse la última copa cosa que aceptó inmediatamente. Subimos, pagamos a la canguro y mientras yo echaba un vistazo a los niños que estaban dormidos, mi compañero preparó unas copas. Ya sentados le pregunte que le había parecido lo que había hecho esa noche, a lo que él me dijo:
- Desde luego Mar eres increíble, pero me has dejado caliente como una estufa en pleno desierto
Mi compañero mirándome me dijo:
- ¿Verdad Mar que esto tiene solución?
A lo que conteste que si, que claro y que además yo también estaba completamente caliente. Eso si le dije:
- Ya sabes que me excita muchísimo ser desnudada y ya que tu eres el invitado...
Me puse de pie lo mismo que él, uno frente al otro. Cuando iba a llevar su mano hacia mi cintura, le paré y le dije que prefería que me desnudara estando el ya desnudo.

Así que empezó a sacarse toda la ropa y cuando quedo desnudo me fije en su polla gorda y bien dura. Mi compañero también se había desnudado y sólo quedaba yo vestida. Entonces le dije que me fuera desnudando pero siempre siguiendo mis indicaciones. Nuestro amigo entonces llevó sus manos a mi cintura, empezando a deslizarme la falda por mis piernas, y con un poco de ayuda por mi parte me la saco. Le alargue una de mis piernas, tomo con sus manos una bota y estirando me la saco, luego repitió la operación con la otra.
Al terminar le pedí que se aproximara a mí y dirigiendo mis pies hacia su polla, se la empecé a acariciar. Veía que esta iba dando saltitos y paré por precaución. Me levanté y le dije que me sacara otra pieza de mi ya exiguo vestuario. Se decidió por las braguitas y confieso que me dio un poco de vergüenza, pues sabia que estaban completamente mojadas. Por fin le dije que terminara de desnudarme con lo que acercándose a mí, empezó a desabrocharme los botones de la camiseta. Entonces yo aproveché para acercarme a él y llevar mi coño a la altura de su polla. Una vez que me hubo quitado la camiseta, llevé mis manos hacia su cintura y me apreté a él para que sintiera el calor de mi coño en su polla y de mis tetas en su pecho. Mi compañero aprovecho para situarse detrás de mí y tomándome por mi cintura, apoyó también su polla entre mis nalgas. Empezamos a bailar en esta posición de bocadillo hasta que les pedí que me dejaran sentar y que cada uno me besara y acariciara una de mis tetas. Rápidamente tenía dos manos en cada una de mis tetas que luego fueron cambiadas por una boca junto con una mano en cada pecho. Sentía como los pezones se me iban endureciendo con cada caricia, con cada chupada y con cada mordisquito.

Notaba como un par de manos también me iban subiendo por mis muslos, acariciándolos. Entonces yo separé bien las piernas llena de excitación, y una de las manos empezó con sus dedos a trazar círculos alrededor de mi clítoris mientras notaba otros dedos jugar con el pelo de mi coñito hasta que se fueron deslizando hacia mis labios que fueron acariciados y abiertos aún más. Noté como la presión de los dedos que tenía acariciándome el clítoris aumentaba y como los otros dedos se introducían en mi coño, a todo esto sin que mis tetas dejaran de recibir besos, succiones, caricias, pellizcos o mordisquitos. Yo ya no pudiendo más me vino un orgasmo como nunca había tenido y ellos al notarlo siguieron con más empeño hasta que les hice parar.
Le pedí a mi compañero que se estirara en el sofá y lleve mi boca hacia su erecta polla poniéndome yo sobre él pero dejando libre el camino de mi ano y mi coño. Cuando empecé a chupársela, noté como la lengua de nuestro amigo empezaba a acariciarme en ese espacio que hay entre mi agujero anal y mi coño, sentía su lengua dirigirse a mi culo mientras yo iba chupando la polla a mi compañero. Poco a poco fui aumentando el ritmo de la mamada a mi marido y entonces noté en mi ano la lengua de nuestro amigo como si quisiera entrar por ahí. Paré un momento de chupar la polla de mi compañero y me concentre en el placer que estaba sintiendo con esa lengua. Al momento volví a chupársela a mi compañero, primero el capullo, luego pasando toda mi lengua por su erecto y duro pene y terminando por chuparle los huevos. Luego me la puse toda en la boca y empecé a follarle así, y al mismo tiempo notaba que la lengua que tenia en mi ano se había introducido en él, y saliendo y entrando me estaba siendo follada por el culo con una lengua. Aquí tome otro orgasmo de campeonato y paré al mismo tiempo de chupar, ya que notaba que en caso contrario mi pareja se iba a correr en mi boca.

Les pedí que cambiaran de posición y entonces diciéndole a nuestro amigo que esta vez no se aguantara, le empecé a chupar su polla, mientras que a mi marido le ofrecí mi culo ó mi coño para que escogiera; él escogió mi coño y llevando su boca hacia ahí, empezó a pasarme la lengua a lo largo de toda mi raja varias veces para terminar dedicándose a lamerme y darme pequeños golpecitos con ella en el clítoris. Yo mientras fui chupando con más intensidad la polla de nuestro amigo mientras que con una de mis manos le iba masturbando al mismo tiempo. Mi compañero me estaba succionando el clítoris y eso para mi es mortal, pues tomo unos orgasmos fuertísimos y seguidos que casi hacen que me desmaye. Así que con la polla de nuestro amigo en la boca tuve que parar para concentrarme en el placer que estaba recibiendo. Al rato mi marido paró con su lengua y yo continué con la mamada a nuestro amigo hasta que de pronto noté como la polla de mi compañero se introducía en mi coño y una de sus manos acariciaba mí ya excitadísimo clítoris. Esto me hizo aumentar aún más el ritmo de mi chupada, el ritmo me lo iba marcando los embites que mi marido me daba, hasta cierto momento en que noté una especie de erupción en mi boca y sin tiempo de nada sentí dentro de ella una inundación de leche que casi me ahoga. Sin sacarme la polla de nuestro amigo de la boca, empecé a notar en mis entrañas el anuncio de un nuevo y bestial orgasmo, al tiempo que notaba también mi coño inundado por la descarga de semen de mi pareja. Los tres estábamos agotados por todo lo sucedido aquella noche tan intensa, así que decidimos concluir aquella sesión de sexo, exhibicionismo y morbo.

1 comentario:

Inspirate!