jueves, 17 de septiembre de 2009

Mi tia

Cierto día decidí invitar a mi hermosa tía (hermana de mi padre) a una cena, es una mujer que todos sus atributos los tiene bien dotado, aceptado la invitación me dispone a escoger un lugar caleta, era las 8 pm estaba nervioso, la vi llegar con un traje que lucia muy sexy cosa que me puso de punta la invite a subir a mi auto y partimos, en camino casi no hablamos solo nos mirábamos y sentí que las cosas con ellas saldrían de maravilla. Ya en la mesa me dijo lo buen acogedor que se encontraba el lugar, mientras eso me decía, y como estábamos frente a frente en la mesa, y el lugar , que tenía una luz muy tenue, y sus mesas eran pequeñas para hacer más intima la cena, siento que su pié, del que se había sacado sus zapatos, me restregaba la verga muy suavemente, cosa que me sorprendió enormemente a lo que yo respondí quitándome mi mocasín y colocando mi pié entre sus piernas, notando que ella no se había puesto nada debajo de su falda.Con una sonrisa me dijo: " te diste cuenta, no, corazón? ", "me puse así para ti y para no perder tiempo por se a que me invitaste a salir". Ya aclara la situación me sentí mas en confianza.Nos trajeron el pedido, la comida estaba deliciosa, pero nosotros estábamos más interesados en tocarnos con nuestros pies, así que luego de tomarnos una botella de vino, no pedimos postre, pero si la cuenta y calzando de nuevo nuestros zapatos, decidimos partir a un Hotel pero a cuartos separados.Con nuestras respectivas llaves en nuestro poder, tomamos uno de los ascensores y ni bien cerraron sus puertas, nos apretamos y besamos ardientemente, apretando mi sexo contra el suyo y acariciando las dos masas de sus glúteos, mientras que también aproveché para acariciar sus desnudas intimidades, las que ya presentaban una lubricación excelente.Por las dudas al llegar a nuestro piso, hicimos la ceremonia de despedirnos en la puerta de ella, y yo presuroso, entre a mi habitación, y luego de desvestirme, procedí a abrir la puerta de comunicación y pasa al cuarto de Norma así se llama. Ella apareció desde el baño, con solo un camisolín totalmente transparente, y sin nada abajo, por lo que se podía admirar en toda su majestuosidad la belleza de ese cuerpo y su conchita bien depilada.Nos abrazamos con ardor y comenzamos a besarnos apasionadamente, mientras nuestros sexos se refregaban uno contra el otro, y yo comencé a besar su cuello y decirle palabras bonitas al oído.Deslicé su camisón de sus hombros y comencé a besar primero su espalda descendiendo por su columna vertebral hasta sus nalgas, separando las mismas con mis manos, y besando también ese culito que tanto admiraba, y la conchita, que a estas alturas se veía inflamada y esperando ser penetrada.A todo esto, Norma emitía unos pequeños gemidos, cada vez que mis labios y mi lengua tocaban alguna zona sensible, en especial cuando me detuve a la entrada de su ano y luego al seguir con sus labios vaginales. Luego bajé por su plano abdomen, y llegué a la puerta de su concha, la que ya presentaba una muy buena lubricación, efectuando allí suaves masajes circulares sobre el botón rosado de su clítoris.Ella seguía con sus ojos entrecerrados y entre pequeños suspiros y gemidos me decía: "seguí papito, que buenos son tus masajes, continua así, que tengo sensaciones que ya había olvidado, seguí, masajéame bien mi clítoris, para que se ponga a mil y te pueda dar toda mi leche, sigue, sigue.....”.Como yo a esas horas también estaba muy caliente, comencé a introducir mis dedos dentro de esa cuevita caliente que era su conchita, y cuando ella comenzó a efectuar movimientos con su pelvis, sacándome el calzoncillo, procedí a introducir de un solo envión mi verga dentro suyo, sintiendo de inmediato como los músculos de su vagina me aprisionaban mi verga y me descargaban como una corriente eléctrica.Norma colocó sus piernas alrededor de mi cintura para que pudiera llegar más adentro de su concha, dimos inicio a un baile, donde nuestras cinturas se adelantaban y retiraban al compás de nuestras embestidas."Dame todo tu verga, la quiero toda dentro mío, cogeme con ganas, que yo te voy a dar todo el gusto que vos quieras, así, papa, seguí así que te siento dentro mío, te gusta tu putita, amor? que rico...., seguí, me volvés loca, quiero que me cojas toda la noche, papi, damela toda, UHHHHH, que bonito, SIIIIIIIIIIIIII, ya estoy por venirme, cuanta leche tengo para vos, dame la tuya, papito, acábame adentro que quiero sentir tu lechita caliente ", cuando en ese momento, sentí que ya próximo a eyacular, ella se abrazo con mayor fuerza a mí y casi parándose, comenzó una serie de convulsiones, durante las cuales, yo sentía como acababa y su leche rebozaba su sexo." Me haces acabar como una yegua, papito, que lindo que me coges, sentí cuanta leche tengo para vos, Hay, que rico lo que siento, me muero de placer, sentí como vibra mi concha, y yo siento tu verga que me destroza, pero que placeeeeeeerrrrrrrrrr ........... hay corazóooooonnnnnnn ".Con lo cual, luego de tan tremenda acabada, me desplomé sobre ella, sin sacar mi pene de su interior, y ante eso, Norma me hizo dar vuelta, poniéndome boca arriba, y se sentó con mi verga dentro suyo, moviendo sus caderas, para ir palpitando como iba disminuyendo su tamaño, pero queriendo disfrutarlo hasta el final.Cuando se hubo calmado, se cambio de posición, y comenzó a chuparme el pene de una manera, que en pocos momentos lo limpió de todo rastro de leche mía y suya.Nos servimos una copa de champagne de la provisión del frigobar del cuarto y brindamos por el grato momento, a lo que ella agregó con una sonrisa pícara. " lo que más placer me da, es el hacer el amor con este sobrino, y sin tener ningún remordimiento de que fuéramos parientes, me ha dejado tan satisfecha en este día, que ni mi marido en cinco años lo podría hacer.... "